ejecutado.jpg

Esta madrugada China ha cruzado una frontera que nunca antes había hecho. Se trata de la primera ejecución de una persona británica en 50 años y desde luego China ha demostrado que sigue siendo un país con castigos crueles y desproporcionados. Esta persona había sido castigada con la pena de muerte por introducir en el país droga, que es un delito importante en China, pero nunca debería haber sido castigado de esta forma, que es algo inhumano.

Se ha esperado hasta el final para ver si había compasión por parte del presidente, pero al final el británico ha sido ajusticiado, algo habitual en un país como China, que mantiene la pena de muerte. Según la familia de esta persona, se le habría encontrado droga en su maleta que no era suya, sino que se la habrían colocado dentro sin darse cuenta. Es desde luego un asunto de extrema importancia y desde Gran Bretaña están sorprendidos por la actuación de China.

Es por desgracia una demostración del poder de China, dejando claro que es un país con mucho poder y que cumple las penas de muerte aunque sean personas extranjeras. Lo cierto es que un castigo como la pena de muerte no debería existir, porque hay muchas otras formas de poder castigar a una persona. Si el castigo de meter droga se castiga con la pena de muerte, es complicado imaginar un peor castigo cuando se asesina a una persona, porque es un delito mucho más grave y de extrema importancia en este caso, aunque en ambas ocasiones el castigo no debería ser la pena de muerte.

Foto|ABC

Esta entrada fue publicada en Sin categoría. Guarda el permalink.