Otro buen consejo para poder regatear en China es considerar las prendas como falsificaciones, porque en la mayoría de los casos lo son, por lo que su precio es mucho más bajo de lo que te quieren cobrar. Los chinos saben mucho porque te pueden hacer un lote de productos a un precio que en principio parezca reducido, pero que haciendo cálculos, no sea tan buen precio. Es ciertamente el momento de actuar para poder reducir ese precio inicial que nos han dado. Con un poco de maña y paciencia, se puede rebajar bastante este precio, aunque debes tener mucha mucha paciencia con el vendedor.
Tu debes mantener el precio que piensas que es el adecuado y mantenerlo a pesar de lo que te diga el comerciante. Hay muchas personas que usan como técnica el marcharse de la tienda y en pocos seguros seguro que el comerciante te llama y te dice un precio más rebajado. Es una técnica que nunca suele fallar, por lo que es una buena forma de poder pagar menos por un artículo que realmente no vale el precio que te había dicho el comerciante en un principio. Hay que pensar en un precio justo para ambos.
A los comerciantes no les suele sentar nada bien que te marches sin comprar, por lo que es normal que se enfaden, pero siempre debes tener en cuenta que saben actuar perfectamente y están en su papel para que al final acabes aceptando su precio. Esto es cuestión de suerte y saber esperar paciente a que el comerciante rebaje el precio hasta que te parezca un precio más que razonable por los productos, que suelen ser falsificados en muchos casos, no en todos.
Vía|3viajesaldia